martes, 31 de julio de 2012

40. Vivencias de xīn líng 心灵


Xīn líng y Buku se deslizan ladera abajo por un tobogán gigante de légamo en un vaivén de giros imprudentes, salpicando de besos el aire y seguidos de cerca por el concierto escandaloso de la tormenta. Un lienzo con relieves color púrpura, les cubre de júbilo y la excursión se vuelve excitante.
El cielo, tras el preludio de una lluvia dulce y pausada, organiza una fiesta inesperada esparciendo por el monte un sinfín de sonidos y fragancias. Las nubes se amotinan sembrando un gran alboroto. Espirales de risas salpican el aire tejiendo un revuelo de notas y acordes de fiesta.
Envueltos en viscosa indumentaria de fango, y deambulando caracoles complacidos por ella, Xīn líng y Buku van dejando rastros de inocencia y aventura. Entran a la casa trastabillando, sin sospechar siquiera el problema ocasionado por su ausencia.
La alegría, envuelta en colores llamativos, gravita etérea, como burbuja de aire cálido que se aspira con ansia, del mismo modo que la mariposa succiona el néctar de las flores hasta quedar satisfecha.

sábado, 21 de julio de 2012

39. Vivencias de xīn líng 心灵


El Firmamento enciende su imperio y los rayos funden el paisaje en mil colores tornasolados. Ulula el viento barriendo los campos y haciendo balbucir a los cultivos. Enmudece el grillo. El mundo comienza a tararear su canto.
Xīn líng, tendida sobre un terreno de hierba, contempla conmovida el bello despertar sinfónico del mundo. La visión sacude ligeramente sus pensamientos que seguían anclados en el contraste de un paisaje distinto:
Un enjambre humano, teñido de negro, clamaba unánime palabras ininteligibles, aireando cartones y blandiendo féretros. Sumándose al mismo, gente ataviada con palabras extrañas sobre la ropa enlutada, y añadiendo más interrogantes a su desconcierto.
Xīn líng cierra los ojos, y, con la complicidad del deleite que la rodea, penetra dulcemente en el cerebro. Camina con delicadeza por tiernas cavidades hasta llegar al lugar deseado. Las palabras, que dormitaban exhaustas la lectura de algún libro, asoman al instante, como si les hubieran pulsado algún resorte oculto:
Cuando el mundo da un salto hacia atrás, dejando en el camino más miseria y desolación, el rechazo es tan grande, que los colores, a modo de símbolos, necesitan representarse.

sábado, 14 de julio de 2012

38. Vivencias de xīn líng 心灵


Si se abriera una grieta en el inmenso tapiz que nos envuelve, y si tras esa grieta existiera un mundo capaz de ir hacia atrás en el tiempo, Xīn líng se escurriría por ella con los ojos cerrados.
La autora, como es previsible, se arroga el derecho y la libertad de girar la llave del tiempo y entrar con sigilo al conflicto.
Entre bisbiseos y confidencias, y con la alegría y el placer de encontrarse,   Xīn líng y Shuì se entregan sin estorbos a impregnar el aire de emociones. Y el secreto se elevó sin trabas, como la cometa que se deja llevar por el viento. Voló musitando un nombre, el de Buku. 
La desolación de Xīn líng es tan grande como un campo de girasoles recién arrasado por un incendio. Cierra los párpados e implora suavemente un alivio a la culpa. Penetra con suavidad en el cerebro, y las palabras, solidarias y cómplices, deciden por unanimidad dejar al verso que se pronuncie:
Las lágrimas
brotaron límpidas
y creció la hierba

La culpa lloró
de pena
y nevó en los montes

El dolor
gimió la enseñanza
Y siguió la vida.

jueves, 5 de julio de 2012

37. Vivencias de xīn líng 心灵


El sol enfoca la mirada de un color intenso sobre la superficie del mar, haciendo vibrar con matices dorados sus brocados de nácar.
Xīn líng y Buku se adentran rasgando el agua con acordes solemnes y gozosos, tremolando las olas un velo de raso a su paso. Las gaviotas observan mientras cargan de misterios su vuelo.
Avanzan de la mano salpicando el agua de emociones y pálpitos, y regalando al viento hálitos de gloria. El vaivén de las olas sirve de cortejo al sentimiento.
Una danza de luces
sacude el aire
posando su delirio
sobre las aguas

Reverbera el candor
con suspiros de raso
jugando la emoción
bajo las aguas